
Como si de un espejo se tratara, si miraras a través y te fijaras en su reflejo, no sólo podrás ver tu propia imagen.
Es entonces, cuando abres bien los ojos, cuando eres niño, y vuelves a nacer y aprender de lo nuevo, cuando vuelves a crear universos sólo con tu mirada, o con tus pensamientos. Esa es la magia del que mira y del que ve en una imagen a seres de otros mundos que te inspiran y están a tu alrededor alentándote a sacar la más hermosa de las imágenes.
Quizá algún día saque la imagen más bella... Hasta ese momento me conformo con un túnel en el tiempo que me llevará a otro lugar y a otra parte.
2 comentarios:
Tenías razón: Me encanta esta imagen! Ese túnel tan onírico y tan rodeado de vida, de naturaleza, de verde, de luz.. parece que, sin darte cuenta, se abrió ante tus ojos para llevarte directo al paraíso.. Besos!
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